miércoles, 16 de enero de 2013

Emprendedores de Lanzarote, toca apoyarnos en nuestras fortalezas


Los emprendedores son personas con metas y sueños, podemos ser emprendedores de París o emprendedores de Lanzarote  con objetivos que casi siempre  se convierte en “nuevos objetivos”. Tomemos los propósitos que cada inicio de año adquirimos, como por ejemplo aprender inglés. Si llegado el próximo final de año, comprobamos que no hemos aprendido inglés, nuestra percepción general será de fracaso. Perderemos nuestra visión periférica y todo será negativo. Nos anclamos así en nuestras debilidades, programándonos para nuevos fracaso. Si iniciamos nuestra empresa desde el punto de que en el pasado no lo conseguimos, “estamos en el camino de la perdición”.

Para conseguir nuestros objetivos, debemos iniciar nuestro camino desde un punto de fuerza, es decir, poniendo el foco sobre nuestras fortalezas. En vez de analizar el año desde el fracaso que ha supuesto no aprender inglés, analicémoslo desde el punto de las cosas que hemos hecho bien. Debemos pensar que la simple posibilidad de establecer unas metas, es una victoria y es el resultado de una evolución. De acuerdo, no hemos podido aprender lo que deseábamos, pero  ahora toca sacar el lado positivo de esta situación. Quizás en nuestro interés inicial visitamos varios centros de formación, conocimos nuevas personas o simplemente, aprendimos a desenvolvernos con más soltura en internet.

Ser emprendedor tiene un claro componente motivacional. No sé puede tener el carácter emprendedor y estar anclado en nuestras debilidades. Cada revés que tengamos, será una oportunidad de aprender y evolucionar. En nuestra actitud está un alto porcentaje de nuestro éxito.



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  • miércoles, 16 de enero de 2013


Los emprendedores son personas con metas y sueños, podemos ser emprendedores de París o emprendedores de Lanzarote  con objetivos que casi siempre  se convierte en “nuevos objetivos”. Tomemos los propósitos que cada inicio de año adquirimos, como por ejemplo aprender inglés. Si llegado el próximo final de año, comprobamos que no hemos aprendido inglés, nuestra percepción general será de fracaso. Perderemos nuestra visión periférica y todo será negativo. Nos anclamos así en nuestras debilidades, programándonos para nuevos fracaso. Si iniciamos nuestra empresa desde el punto de que en el pasado no lo conseguimos, “estamos en el camino de la perdición”.

Para conseguir nuestros objetivos, debemos iniciar nuestro camino desde un punto de fuerza, es decir, poniendo el foco sobre nuestras fortalezas. En vez de analizar el año desde el fracaso que ha supuesto no aprender inglés, analicémoslo desde el punto de las cosas que hemos hecho bien. Debemos pensar que la simple posibilidad de establecer unas metas, es una victoria y es el resultado de una evolución. De acuerdo, no hemos podido aprender lo que deseábamos, pero  ahora toca sacar el lado positivo de esta situación. Quizás en nuestro interés inicial visitamos varios centros de formación, conocimos nuevas personas o simplemente, aprendimos a desenvolvernos con más soltura en internet.

Ser emprendedor tiene un claro componente motivacional. No sé puede tener el carácter emprendedor y estar anclado en nuestras debilidades. Cada revés que tengamos, será una oportunidad de aprender y evolucionar. En nuestra actitud está un alto porcentaje de nuestro éxito.





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